Últimas horas en Moscú

Las escaleras del metro pueden tener 90 metros de profundidad, o incluso más. Hay un mundo paralelo bajo tierra. Fascinante, distinguido y señorial, directamente relacionado con la esencia soviética que rescató al país en tiempos de opresión, guerra y hambruna, para levantarlo y hacerlo grande hasta posicionarlo como la contracara del capitalismo salvaje.

80 de los 140 millones de habitantes que tiene el país, profesan la religión que imparte la Iglesia Ortodoxa Rusa. Los servicios (luz, agua, gas, combustibles) tienen tarifas muy asequibles por la riqueza de recursos naturales. Y un par de tarjetas llamadas “Troika” (la SUBE rusa) nos permiten recorrer la capital con total comodidad a través de su entramado subterráneo, para evitar un enjambre de atascos y aglomeraciones.


 Poco a poco entramos en sintonía con el lugar. Se siente placer permanente al trabajar, aún rodeados de frío y yendo a salto de mata. La calidad del trato que nos dispensa el personal del Godzilla's, elegido Mejor Hóstel de Rusia en 2013, da tranquilidad. Se agradecen los bares abiertos las 24 horas, como el que de madrugada atiende un empleado egipcio nacido cerca del Canal de Suez y fanático del Real Madrid. Simpático aventurero que al salir de su país para conocer el mundo se fue a Roma, conoció Italia, pero cuando vio que el trato a los extranjeros y refugiados sufría serias alteraciones, se embarcó rumbo a Moscú. Su sueño, relata mientras nos sirve un par de shawarmas, rollitos de verduras, masas y papas rellenas, es radicarse en Madrid. Se ríe cuando le contamos que tres agentes de policía quisieron hacernos borrar el contenido de nuestras filmaciones en la Plaza Roja a metros de la Catedral de San Basilio, frente al Kremlin. Recomienda prudencia y convivir siempre con respeto, sin llamar demasiado la atención.

Los 5 primeros días de travesía, en Moscú, tocan a su fin. Este lunes 24 de abril viajamos temprano a San Petersburgo, la ciudad en la que en junio de 2018 Argentina se medirá a Nigeria en el último partido del Grupo D. El trayecto es en el Sapsán, tren de alta velocidad que cubre en 4 horas los 712,8 kilómetros que separan a ambas ciudades. La salida está prevista a diario a las AM 06:49. Hay varios trenes que hacen este recorrido diariamente, una especie de puente aéreo como el que une a Madrid y Barcelona en España y permite que mucha gente desarrolle su trabajo un par de veces o tres por semana.

 El Sapsán puede alcanzar cerca de 150 kilómetros por hora, aunque se prevé que en el futuro cercano ese límite se sobrepase ampliamente. Después de conocer el AVE en España, atrapa la idea de acceder a este recorrido, que seguramente elegirán muchos hinchas de los que viajen a Rusia para el Mundial, para observar los partidos de la selección Argentina. Moscú, en donde la albiceleste se enfrentará a la novata Islandia en el juego del debut en la Copa del Mundo, tiene servicios que enlazan la alta velocidad también con Nizhni Nóvgorod, donde el equipo dirigido por Jorge Sampaoli se enfrentará a Croacia en el segundo compromiso por la fase inicial del Mundial.